El nivel de cultura de un mundo (en éste caso el de la organización que me contenía) se mide por el legado social de sus seres nativos (en éste caso la idiosincracia nacional), y el grado de expansión cultural depende exclusivamente de la capacidad de sus habitantes para comprender ideas nuevas y avanzadas.
La esclavitud a la tradición produce estabilidad y cooperación, sentimentalmente vinculando el pasado con el presente; pero, al mismo tiempo, reprime la iniciativa y encadena los poderes creativos de la personalidad (en éste caso mi iniciativa creadora personal)
viernes, enero 20, 2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
Great site loved it alot, will come back and visit again.
»
Publicar un comentario